Reflexiona...
Cortesía de Pixabay. Foto: Anja Osenberg |
El Pecado
(Serie Nieblas)
En esa oscuridad palpable
que nos trae la niebla,
se refugian los sollozos
como se mecen los juncos
al aire de abanicos de cristal.
Te mentiste en el espejo
y con la mentira te vestiste.
No digas que cansados los ojos
se cansa el corazón.
No digas que tus manos no tienen líneas
porque tu alma las perdió.
No digas que el aire no canta
porque tu huella no llora pentagramas.
No digas que el bosque muere
porque los elfos no bailan tu nombre entre hojarasca.
No digas que me amaste
por desangrar mis labios en púrpura.
No digas que conoces mi piel
por hormiguear mis poros lengua arriba.
No digas nada
porque nada es mentir.
Ese es tu pecado:
amamantar la nada al oído.
© francisco javier costa lópez
GENIAL
ResponderEliminarGENIAL
ResponderEliminarQuerida Sra. Ataulfa:
ResponderEliminarGracias por su breve pero enardecedor mensaje, y más si es por partida doble. Desde luego, queda invitada a venir cuando guste.
Besos
francisco javier costa lópez